Le llamaban Calígula, diminutivo en latín de "Caliga" (sandalia utilizada por los soldados romanos), por el hecho de haber crecido en los campamentos utilizando esta clase de calzado desde su niñez. En su juventud ya era propenso al vicio y visitante de prostíbulos y tabernas. Gustaba de acudir a las ejecuciones de condenados.
Según se desprende de los relatos de sus historiadores, Calígula fue un hombre muy mimado, caprichoso y lunático, con muchos problemas conductuales, con una percepción extremadamente distorsionada de la realidad y que creció en un ambiente familiar cargado de conjuras, pleitos, chismes, promiscuidad, rencillas entre familiares y ambiciones de poder gestados por su madre Agripina la mayor y su abuela Antonia.
Los Hermanos de Calígula eran Nerón, (Tiberio y Gaius Julius quienes fallecieron jóvenes.; Drusus (muerto a manos de Sejano) y tres hermanas: Julia Livilla, Drusilla y Agripinila.
Tiberio desterró a su madre a Pandataria por conspiración y cuando esta fallecía de inanición en el 33 DC, Tiberio le nombraba Cuestor, más tarde sería nombrado heredero al trono imperial.
Se creia asimismo un dios y que todo lo que le rodeaba estaba para sus caprichos y abusos de poder, carente de escrúpulos, adicto al morbo y sádico sexual, obsesionado con su poder de decidir quien vivía o moría, y exento de la más elemental humanidad con probablemente, una segura disfunción cerebral que según Tácito se agudiza durante una noche de tormenta (posiblemente epilepsia).
Las representaciones y estatuas de este emperador lo muestran como un varón de apariencia joven pero con una actitud de poder y feroz mirada ceñuda premeditada que incita al temor.
Debido a que su abuela Antonia desprestigiaba a su tío-hermano Claudio por su aparente estupidez, Calígula no se quedó corto y se burlaba abiertamente de él y le tenía como ejemplo de incapacidad humana.
Durante su mandato se preocupó más por orgías y diversiones que por todo el imperio. Era salvaje en sus relaciones sexuales ya que le gustaba golpear y torturar durante el acto sexual. Su caballo Incitato también lo acompañaba en estas orgías. Amaba mucho a su caballo y le daba todos los gustos, entre otros intentó nombrarlo senador de Roma otorgándole las rentas necesarias para poder optar al cargo, obsequiándole un pesebre de marfil.
Las cosas con las que se divertía llegaron a ser muy exageradas y atroces en sus últimas épocas. En una oportunidad Calígula buscaba una fuente de dinero que arreglara sus problemas, mandó llamar a todas las mujeres de la alta sociedad romana y las prostituyó, obligándolas además a competir entre sí mismas, pues si no las amenazaba con decapitar (uno de sus vicios predilectos).
Es un claro ejemplo de utilización del poder para cometer crímenes como forma de diversión.
Anécdotario de Calígula
Decretó el día de su coronación de emperador como Parília, como si Roma hubiera nacido de nuevo.
Mandó construir un barco de paseo con incrustraciones de oro.
Hizo que se desenterrase la tumba de Alejandro Magno para coger su coraza, la cual se ponía asíduamente.
Dio 8.000 sestercios a una criada por ocultar un crimen que había cometido su amo.
Construyó un puente de 5,3 km. entre Bayas y el dique de Pozzuoli.
Obligó a pagar impuestos a las prostitutas.
Mandó traer varias estatuas de los dioses más famosos de Grecia para que les quitaran las cabezas y pusieran la suya.
No permitió hacer estatuas de nadie que no fuera él.
Mantuvo relaciones sexuales con tres de sus hermanas.
Cuando su hermana Drusilla estaba embarazada de 8 meses de él, cansado de esperar cómo sería su hijo rajó el vientre de Drusilla, acabando con la vida de ella y de su hijo.
Si algún aristócrata se enriquecía, lo obligaba a nombrarle a él como heredero de su fortuna. Una vez hecho esto mandaba asesinar al aristócrata e inmediatamente la fortuna pasaba a su poder.
Desposeyó de su magistratura a los cónsules por tres días porque no se habían acordado de su cumpleaños.
Desautorizó una boda al encapricharse de la novia, con la que después se casó. Posteriormente, al poco tiempo, la repudiaría.
Capó al gladiador Longino por poseer un pene mayor que el suyo.
En cualquier celebración elegía la mujer de un amigo y mantenía relaciones sexuales con ella; si no le satisfacía obligaba a su amigo a que se separara de ella.
A Valerio Catulo le destrozó los riñones en una relación sexual que tuvo con él.
En sus banquetes ofrecía panes y alimentos de oro.
Tomaba perlas disueltas con vinagre.
Se divertía mofándose de los defectos de su tío Claudio.
Quiso destruir los poemas de Homero y los escritos de Virgilio y Tito Livio por no gustarles lo que escribieron.
Mandaba quitar los toldos del anfiteatro Tauro para que el sol diera de lleno a la plebe allí reunida, lo que provocaba múltiples insolaciones.
Lanzaba riquezas y tesoros por las calles para que la gente se agolpara en recoger la fortuna y muriera aplastada.
Comía mientras torturaban a presos alrededor de la mesa y cortaban sus cabezas. Una vez mandó cortar las manos a uno de ellos y que hicieran un colgante con ellas para después ponerlo en el cuello de la víctima.
Gustó siempre de decir frases ingeniosas y graciosas mientras se cometían los crímenes.
Arrojó a un caballero a las fieras; este exclamó que era inocente mientras las fieras ya lo acechaban; Calígula mandó sacarlo y pidió que le cortaran la lengua y que de nuevo fuera arrojado con las fieras.
Hizo descuartizar a un senador y después almacenó en forma de torre los miembros seccionados.
Le gustaba realizar el acto sexual mientras torturaban a algún preso.
Algunas veces visitaba la escuela de gladiadores y luchaba con alguno de ellos; la mayoría de las veces los gladiadores caían voluntariamente y Calígula los mataba fríamente. Luego lo celebraba corriendo por la escuela con la palma de oro de los vencedores.
Obligaba a los padres de sus víctimas contemplar las torturas y ejecuciones de sus hijos.
A los ciudadanos poco afines los mandaba a las minas, a las fieras, los encerraba en jaulas o los serraba por el medio.
No gustaba de las ejecuciones simples, por eso pedía al verdugo cuando torturaba al preso:"Hiérelo de tal modo que él sienta morir".
Cuando besaba a sus esposas en el cuello decía:"Una cabeza tan bella sería arrancada en cuanto yo lo ordenara".
Condenó varias veces al pueblo a pasar hambre cerrando los graneros.
Uno de sus senadores le dijo: "Emperador, por ti daría mi vida en el circo", a lo que contestó Calígula:"¡Hazlo!" Y mandó vestir de gladiador al senador para que luchara en el anfiteatro.
A los senadores que no le eran afines los mandaba a la construcción de calzadas.
En la inauguración de un puente invitó a unos senadores a su barco; a mitad de trayecto mandó a los soldados que echaran por la borda a los senadores; cuando estos intentaban volver a la embarcación Calígula gritaba: "¡Dadles con los remos!".
En algun momento creyo ser dios y se autocrucifico para probar que resucitaría al tercer día. Finalmente eso nunca ocurriría.
Se creía alter ego del dios Júpiter; por las noches le hablaba diciéndole:"¡Súbeme, o te hundiré!". Se creía un dios viviente.
Mandó construir una estatua suya de oro; pedía que cada día la estatua estuviera vestida con la misma ropa que él llevaba. Además comprobaba si le habían hecho caso.
A su última esposa la llevaba delante de los soldados desnuda y con escudo y espada mientras montaba un caballo.
Su hija Julia Drusilla gustaba de arañar los ojos de los demás niños, hecho que enorgullecía a Calígula, ya que se parecía a él.
Decía que le visitaban monstruos demoníacos que le obligaban a cometer sus fechorías.
fuente: Wikipedia
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